Se ha
malgastado a manos llenas, casi de forma demencial y ahora los mismos partidos
que nos han llevado a la situación en la que nos encontramos pretenden “vendernos”
las soluciones.
Por
ejemplo, el 12 de Abril de 2013 el Gobierno anunció la creación de una Agencia
Fiscal Independiente. Esto debería ser una gran noticia si el objetivo fuera
copiar lo que hacen otros países europeos como Dinamarca, Noruega, Suecia,
Alemania, que tienen órganos independientes que fiscalizan las veleidades de
sus gobiernos con el gasto y ayudan a cimentar la confianza de la ciudadanía en
la clase política. Lamentablemente esta Agencia Fiscal Independiente la va a nombrar
el Gobierno y dependerá del Ministerio de Hacienda, y Hacienda ya tiene el Instituto de Estudios
Fiscales que ejerce esa misma misión y no es precisamente independiente. De
nuevo los contribuyentes de este desgraciado país perdemos la posibilidad de
reforzar la división de poderes y el control al ejecutivo, ya que no es tan
importante lo que un país recauda sino como lo administra.
En Suiza el
IVA es del 8% para todos los productos y en Canadá el 5%, muy por debajo del del
21%, el tipo general que actualmente hay en España, y no podemos negar el
elevado nivel social que disfrutan los ciudadanos de estos países. También
tienen un IVA menor países de la Unión Europea de gran poder adquisitivo como
el Reino Unido (20%), Francia (19,6%) y Alemania (19%).
El
problema en España no es que se gaste MÁS, sino que se gasta MAL. En relación a
los ingresos públicos existentes, hay un exceso de gastos en dos áreas
fundamentales, la correspondiente a las áreas más burocráticas y esencialmente
administrativas (hecho que se relaciona con la proliferación de organismos de
dudosa utilidad en todos los niveles de la administración) y la relativa a
políticas sectoriales (cultura y ocio, vivienda y políticas sectoriales
–agricultura, industria, comercio, transportes, comunicaciones…-). La
consecuencia es que las partidas de sanidad, educación y políticas sociales
están por debajo de los niveles de los principales países europeos.
En el
programa electoral de las últimas elecciones (20N del 2011), tanto el PP como
el PSOE dedicaron poca atención al tema tributario, tres páginas de 214 (PP) y
cuatro de 149 (PSOE), y cada partido destacó especialmente aquello que pensaban
iba a ser más beneficioso a sus potenciales electores. Otro error más que
cometen de los políticos de este país, pensar que una forma de ganar es que los
otros pierdan, cuando lo que conviene a España son políticos que sepan ver lo
que los anglosajones llaman “win-win” (ganar-ganar), un acuerdo, trato o negociación
en la que todos los involucrados resultan beneficiados.
Así vemos
que al igual que se gasta mal también se ingresa MAL. La carga fiscal está
desigualmente repartida. Pagan impuestos aquellos que reciben rentas
perfectamente controladas por Hacienda a través del mecanismo de retenciones
(es decir, los perceptores de rentas salariales y rendimientos del capital
mobiliario), y en cambio Hacienda ha renunciado o no ha avanzado en la recaudación
de otros contribuyentes: los evasores fiscales, las grandes empresas y
multinacionales, la economía sumergida, etc… Esta radical injusticia del
reparto de la carga tributaria es un problema tan grave que deberá ser
acometido con carácter de máxima urgencia. Además la reforma del IRPF en 2012 no
cumple los dos primeros objetivos marcados por la Unión Europea, que eran que
se redujera la imposición sobre el trabajo y se ampliaran las bases, y en lugar
de esto se ha subido los tipos de gravamen y en la actualidad España es el
quinto país del mundo con el tipo marginal del IRPF más alto, alcanzando el
52%, siete puntos más que un año antes.
Nuestros
políticos han logrado que la credibilidad de España esté por los suelos y con
ello que la financiación de la deuda pública sea una carga cada vez más pesada.
Y no da confianza que los actuales dirigentes aumentaran ficticiamente los
ingresos tributarios del 2012 en unos 8.000 millones, con el aumento de los
pagos fraccionados del impuesto de sociedades y el retraso de devoluciones de
IVA y Sociedades y que esto en el 2013 produzca una caída equivalente en la
recaudación, y peor que se intente esconder haciendo un juego con las
devoluciones del año siguiente, en una especie de esquema de Ponzi,
convirtiendo esta medida extraordinaria en permanente.
El
Gobierno sigue sin afrontar la realidad ya que las medidas de aumento de
ingresos deben implicar aumentos reales, no simplemente contables como la única
vía para poder sacar a España de las listas de países de la UE con menores
presiones fiscales. Esta política es extremadamente negativa para la economía
pues retiene temporalmente recursos que pertenecen a las empresas en un momento
en el cual, ante la falta de crédito, es justo lo contrario que necesitan. Estos
acontecimientos nos confirman que a las acciones de política tributaria les falta
un plan.
Nos queda
claro que el cambio a una política fiscal eficiente solo vendrá de la mano de
un cambio político, como puede ser el caso del “Partido Escoba”, que logre un
consenso en torno al mismo, y que más allá de posiciones doctrinales,
ideológicas y políticas procure la satisfacción del interés general y la
cohesión social.
Accede en
el siguiente link a las propuestas que hacemos para este Ministerio:
Propuestas
a votar para el Ministerio de Hacienda.
Haz clic
si quieres consultar en Wikipedia las competencias de este Ministerio.
Disculpen las molestias.